¡Hay que bonito es el amor! estar pendiente de alguien, recibir los mensajes de textos o de Whatsapp de esa persona que uno tanto anhela. Sentir que flotas y las famosas mariposas en el estomago cuando escuchas su voz y hasta poner cara de idiota cuando lo ves. Todo muy bonito.
Lo difícil es, cuando te enamoras tu solo, si un amor digamos que... unilateral, lo mas incómodo del mundo. ves a esa persona como un todo, te imaginas todo junto a esa persona y esa persona ni se entera de tu existencia y hasta notas que te repele, pero ¿a quién no le ha pasado alguna vez esto?
Que tu seas el todo de una persona o viceversa y que ni por enterado se de, es una situación incómoda y un tanto sofocante, lo traigo a colación porque he estado leyendo libros en los que pasa esto y entonces me dije: ¿Cuántas veces me pasó esto a mí? y ¿Por qué se sigue repitiendo en las personas?
De verdad es que idealizamos a nuestra media naranja y cuando aparece una persona con estas cualidades sin importar posición económica, color o contextura física se nos hace en la iris de los ojos en forma de corazón como en los muñequitos.
Recuerdo que en mi caso particular una vez conocí a un joven puertorriqueño ¡Oh Señor! si que estaba loca, el pana muriéndose por mi hermana y yo con el babero pendejo (disculpen la expresión) y ahora que lo recuerdo no era un adonis pero me derretía con su trato (el era un caballero, de besar la mano y hacerte sentir en confianza), era todo lo contrario a lo que yo idealizaba porque en ese entonces yo quería a un hombre formal y de buenas costumbres, con un corte estilo militar, y este caballero tenía el pelo largo, usaba trenzas, aretes, y no se puede quedar el estilo de you con ropa super ancha de aquel entonces y yo era muy menor en aquella época con decir que para mi escuchar reggaeton era algo así como un martirio y ahora digamos que todavía algunos expositores me dan grima, pero si los escucho. y ahora que caigo en cuenta no era como vestía era lo que representaba para mi; sí, volvemos al Síndrome Disney Princesa, siempre en la búsqueda de un vivieron felices para siempre.
Para no cansarles el cuento, me ponía celosa e histérica y para el yo no existía, pues el para mi era mi NOVIO pero claro el no lo sabía, lo que me hacia enojar de la peor manera, y ahora que lo pienso ¡Que infantil! ¡Que ilusa! pero así pasó.
Enamorarse solo, es un verdadero fastidio porque si lo piensas, amas a alguien que no desea tu presencia y que a tu lado se siente incómodo/a, que a lo mejor es cortés contigo por educación o porque quiere sacarte un beneficio, pero estamos tan ciegas/os que no lo entendemos.
¿Cómo puede ser posible esto? no lo se, y sabes que no voy a investigarlo, ya es suficiente golpearse con la pared de cristal una y otra vez, como para ser masoquista y volver a pasar por eso.
Vivir esperanzados de que algún día se fijará en mi o en ti no dará resultado si no lo demuestras con acciones. Es una calamidad vivir enamorado solo, el sufrimiento es de los peores y quiere uno esa probadita de ser en algún momento correspondido.
En conclusión siempre ámate tu primero un millón de veces y si te enamoras solo/a que sea de ti mismo/a que traerá un mejor efecto y excelentes beneficios.
