Hace algunos meses les compartí vivencias y acontecimientos de la vida de una persona que sufre sobrepeso, en esta ocasión les comparto algunas otras cosas por las que ser gordo/a es un problema para nosotros mismos y estoy segura que algunos se sentirán identificados y otros dirán que lo que les comparto es mentira.
Personas que poseemos sobre peso estamos expuestos a comentarios y opiniones que no solicitamos, gente que se le acerca a uno y le aconseja con amor y cariño sin conocerte y lo tomamos mal, nos enojamos y solemos decir: ¡¿y a usted qué le importa?! pero no sabemos que viene detrás de ese consejo y es que esas personas lo han vivido en carne propia o por un pariente. Otras simplemente lo hacen para burlarse y hacernos sentir mal, porque esa acción les da placer.
No es que sea especialista en el tema, pero lo he vivido en carne propia y entiendo que a alguien más le puede servir en un futuro.
Tomar la decisión de perder peso puede resultar difícil por diferentes razones:
1- Si lo haces, usando dietas que les funcionaron a otras personas, porque de la misma manera en que somos diferentes, lo es nuestro metabolismo, necesariamente no te funcionará a ti.
2- Existe el efecto rebote, que mientras estas llevando la dieta, pierdes peso, pero al dejarla engordas las libras perdidas y se le agregan mas libras adicionales, es decir, si perdiste 15 libras lo más probable es que subas 30, por lo que te desanimas y renuncias nuevamente a otro régimen alimenticio.
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3- Sino tienes el apoyo de tus parientes y amigos, te harán caer en la tentación en lo que sea que esté fuera de la dieta y que usualmente está dentro de las cosas que te encantan.
4- La decisión de perder peso debe ser tuya, no por presión de parientes, amigos o pareja, porque el cambio debe venir de adentro por motivación propia y por las razones adecuadas tales como: por salud, por el deseo de tener hijos, para sentirte bien contigo mismo o por amor a una vida sin dolor corporal o hasta sin depresión.
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5- Al decidir perder peso, debes hacerlo de manos de un nutricionista o nutriólogo, porque este especialista luego de evaluarte y hacerte las analíticas correspondientes podrá crear un plan alimenticio adecuado para ti y todo esto acompañado de rutinas de ejercicio, sesiones de masajes reductores y lo más importante un psicólogo que te ayude a comprender la decisión que has tomado y ver y entender los resultados de tu decisión.
Como todo en la vida se empieza con el primer paso y no faltará quien quiera desanimarte para que dejes eso que te da resultados, porque las personas pueden ser envidiosas.
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Algo que una vez escuché de una persona es que tenía una pareja en sobrepeso, ya saben gordita o gordito y esa persona tomó decisión hacerse una cirugía bariátrica y al ella ver que el bajó de peso ella lo dejó porque ella quería que el fuese gordo y por ende estaría exclusivamente para ella, por eso es que existen personas egoístas pero también envidiosas.
Envidiosas porque ven que vas progresando y haciendo el esfuerzo y empiezan a hacer actividades en las que se hacen brindis o hasta logran que termines cocinando justamente lo que diríamos lo prohibido de tu menú y que luego de tener un determinado tiempo sin comerlo lo deseas fervientemente, claro no todos caen y ya esa es otra historia.
Recuerden que todo es un paso a la vez y que es un sacrificio que tendrá una recompensa para ti mismo.
Existen muchas personas que han alcanzado la meta de perder peso, y hay muchas historias de éxito y una que está actualmente frente a los ojos del mundo latino es el caso de María Antonieta Collins y les dejo el enlace para que vean este proceso y entiendan lo que nos sucede y que cada persona tiene un método diferente para perder peso y el proceso que la llevó a tomar esta decisión de vida.
Otra manera es participar de grupos de apoyo, en los que se hagan ejercicios y que en esos momentos de debilidad y flaqueza sean su mano amiga.
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